jueves, 5 de junio de 2014

El primer mes de ALEKEI

Hola pequeño Alekei, hace unos cuantos días cumpliste tu primer mes, y por esto decidí desempolvar este blog, no por que no tuviera ganas antes de dedicarte algunas ciberlíneas, sino porque con dos bebés en la casa el tiempo escasea y el trabajo aumenta.

En fin, ya dejandonos de presentaciones lo que quiero decirte mi pequeñito, es lo mucho que te amo, lo supe desde el primer momento en el que supe que venías a quedarte en nuestras vidas... pero lo supe con más fuerza cuando te ví en los brazos de tu mamá en aquella cama de hospital, cuando te aferraste a mi camisa azul a cuadros al momento de darte el primer abrazo.

Solo fueron unos minutos los que tuve para verte esos primeros días... (eso de traerte al mundo en el Seguro Social creo no fue una buena decisición de nuestra parte, por lo cual te pido disculpas jejeje). 

En fin, saliste del hospital, llegaste a tu casita y ahí te recibieron tus pequeños hermanos, el gran Gymaraho siempre preocupado porque no lloraras mucho, y la curiosa y traviesa Adonai que nunca sintió celos de tí, desde el principio fuiste para ella una persona con quién expresar su amor y ternura... Ella de inmediato pidió acceder a ese pequeño que estaba en el moisés... se inclinó y sin que nadie le dijera nada te dió un besito en tu cabeza, te hizo un par de cariños y volteó a vernos con una sonrisa que decía sin palabras "Este es mi compañero de travesuras para toda la vida".

Pasaron los días, comenzaste a alimentarte más y a ganar peso, tus ojitos comenzaron a recibir la luz y a distinguir las siluetas, poco a poco nos regalaste sonrisas, tu cabecita tomó fuerzas y tus mirada se volvió mas avispada... 

Te hiciste pronto adicto a los baños en las tardes-noches para dormir una buena y reparadora siesta, no sin antes tomarte 8 onzas de leche... que hay que decirlo, nunca fueron suficientes para saciar el hambre que siempre te despierta (a ti y a tu mamá) puntal a las 3 o 4 de la madrugada.

Ahora ya levantas tu cabecita, estás atento a todo el ruido... te pones contento cuando escuchas a tu hermanita y tu hermano, cuando te canto y cuando te bañas... y sigues comiendo, durmiendo, haciendo popó y creciendo... aaaa y se me olvidaba lo más importante... sigues haciendonos a tu mamá y a mi los padres más felices del mundo por tenerte a ti y a tus dos hermanitos.

Te amo Mateo Alejandro.

ATTE

Tu papá Gilberto 

1 comentario:

  1. Ahhhhhh! Lloré!
    Yo tu tía que vive en el D.F. también estoy feliz de que llegaste a este mundo... estoy a unos cuantos días de conocerte mi pequeño Alex!

    ResponderEliminar